Las empresas han tenido que asumir sobrecostos que suman más de 2,1 billones de pesos.
Desde el pasado 15 de noviembre, las importaciones colombianas se están viendo gravemente afectadas por las fallas e intermitencias que está presentando el servicio digital de importaciones Syga (Sistema de Información y Gestión Aduanera) de la Dian, luego de hacer unas actualizaciones con el fin de mejorar sus procesos.
Aunque ese día se declaró una contingencia, tres días después la Dian decidió levantarla porque los problemas se habían solucionado y aseguró que los usuarios aduaneros podían realizar sus operaciones y trámites.
Sin embargo, el 20 de noviembre la plataforma volvió a registrar dificultades y se declaró nuevamente la contingencia. Desde esta fecha la entidad no ha vuelto a pronunciarse sobre el tema, incluso, EL TIEMPO se comunicó con la Dian para conocer cuándo se restablecerán los servicios, pero no hubo una respuesta al respecto.
"Desde entonces la página presenta intermitencia, se quiere entrar y no da acceso, cuando se logra entrar no expide los recibos de pago, duplica las operaciones, no deja hacer pagos consolidados, sino que liquida operación por operación", asegura el presidente de Analdex, Javier Díaz, sobre los problemas que han tenido.
Mientras que Miguel Espinosa, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Internacional (Fitac), manifiesta que toda la cadena logística se está viendo afectada, particularmente, las agencias de aduanas porque desde hace un mes y medio se vienen presentando fallas e intermitencias que no permiten que las operaciones fluyan con normalidad en una temporada tan importante como la de fin de año.
"Al ser las agencias de aduanas las que gestionan las operaciones de importación, a través de los servicios informáticos electrónicos de la Dian, obviamente se ven afectadas porque los importadores, en su angustia, dicen que las agencias de aduana no están haciendo bien su papel o no tienen claros los procedimientos”, agrega.
Analdex calcula que cada día de contingencia le cuesta al sector importador 50.000 millones de pesos adicionales. Esto significa que a la fecha ya se acumulan sobrecostos por más de 2,1 billones de pesos porque la carga no se puede mover de los puertos y aeropuertos mientras no se consigan las autorizaciones que da el sistema informático de la Dian.
Por esto, las empresas están asumiendo sobrecostos relacionados con almacenamiento en bodegas, transporte y stand-by de los camiones que deben movilizar las mercancías.
Pero esta no es la única afectación que podrían enfrentar las empresas, pues el presidente ejecutivo de Fitac asegura que en dos o tres años los agentes aduaneros se podrían ver envueltos en procesos sancionatorios que inicie la Dian por las mismas fallas que registra la entidad y que no permiten hacer los procesos como se debería, como ha ocurrido en el pasado por situaciones similares.
"Estamos ante un riesgo muy oneroso por parte de los empresarios que ya no aguantan más. El sector importador está al borde del colapso, no solamente por las pérdidas millonarias en las que se ha visto envuelto por estas fallas informáticas, sino en los futuros procesos sancionatorios que la misma Dian pueda empezar a emprender directamente en contra de los importadores y las agencias de aduanas", señala.
Además, esta contingencia, que ya completa más de 40 días, abre la puerta a futuras demandas que pueden poner las empresas contra los agentes aduaneros por los incumplimientos en las importaciones, ya que los retrasos en la llegada de las mercancías afectan sus ventas en diciembre, un mes que es de gran importancia para el comercio.
Tanto Fitac como Analdex son reiterativos en asegurar que la Dian no les ha dado una respuesta sobre cuándo se superarán los problemas ni tampoco ha querido comprometerse con una fecha. Incluso, cuando se comunican con la entidad les aseguran que "todo está funcionando bien", dice Javier Díaz.
Además, el líder gremial asegura que desde el 2016 la Dian les ha prometido que se tendrá una plataforma electrónica nueva, pero "no han hecho nada. Entonces, se pusieron a hacer un desarrollo propio, contrataron a 100 ingenieros a quienes metieron al sótano de la Dian y al año abortaron eso porque no dio ningún resultado".
Igualmente, comenta que la entidad contrató a una empresa extranjera (CrimsonLogic) para tener un sistema informático moderno, pero hace dos meses se declaró la caducidad del contrato porque el software no se podía modificar para que cumpliera con la legislación colombiana.
"Ahora estamos nuevamente en una situación en donde ellos dicen que van a hacer un desarrollo propio, pero ¿si los ingenieros no han podido solucionar una falla, van a ser capaces de construir una plataforma desde cero? Me parece que no, eso tienen que contratarlo por fuera", afirma el presidente de Analdex.
También cuestiona que para la modernización de la Dian, que incluye la plataforma tecnológica, se contrató un crédito de 250 millones de dólares con el BID, pero a la fecha no se han visto resultados.
LINA QUIROGA RUBIO