Los tramos no construidos son como baches que, de no intervenirse, traerán consigo problemas como tacos interminables. O, en el peor de los casos, los vehículos que transiten por esas vías tendrán que conducir por corredores desconectados.
En Colombia se adelantan 5.567 kilómetros de autopistas de Cuarta Generación (4G) y solo en Antioquia se están ejecutando 1.697 km, el 32% de la inversión de este programa (unos 10 billones de pesos).
Aunque la ola 4G le introdujo a los corredores del departamento vías de especificaciones modernas y altas velocidades de diseño, existen tramos críticos que amenazan la articulación entre los proyectos en construcción.
Estos sectores fueron identificados en un análisis del programa Infraestructura para la Competitividad, de la Cámara de Comercio de Medellín y la Cámara Colombiana de Infraestructura CCI.
José Fernando Villegas, director de la CCI Regional Antioquia, precisó que si bien los proyectos 4G avanzan bien en Antioquia, algunos puntos críticos no están en cabeza de ninguno de los concesionarios y, por ahora, están bajo responsabilidad del Gobierno Nacional. Las obras necesarias en estos broches entre una conexión y otra ascienden a 1,66 billones de pesos.
Son, al menos, cinco trabajos urgentes. En el corredor del sur-Pacífico (292 km), que abarca las conexiones Pacífico 1, 2 y 3, están localizados tres puntos críticos: el intercambio vial de Primavera; los 3,3 kilómetros faltantes que deben ejecutarse en doble calzada y el puente sobre el Cauca en Bolombolo, que de no hacerse interrumpiría el tránsito entre los Pacíficos y las vías Mar 1 y Mar 2 (ver recuadro).
La CCI también alertó sobre el riesgo que representa para los cronogramas el derrumbe de La Sinifaná, que afecta 350.000 personas en el Suroeste y que suma $ 43.000 millones de sobrecostos.
El estudio también evidencia que los tiempos probables de entrega no coinciden: mientras Pacífico 2 y 3 tienen presupuestado su inicio de operación para noviembre de 2020, Pacífico 1 lo haría en abril de 2023.
Los otros dos puntos están en el corredor Noroccidental-Urabá (467 km que incluye a Mar 1 y 2, y el Túnel del Toyo) y en el que están en vilo los recursos para el tramo 2 del Túnel del Toyo. El otro corredor es el Nororiental- Río Magdalena (938 km en cuatro concesiones), en las que las obras en la Autopista al Río Magdalena 2 no presentan un buen ritmo de avance.
Posibles soluciones
Villegas indicó que, frente a estos pendientes, la Nación ha sido receptiva para trabajar en la búsqueda de los recursos. Por ahora estudian la posibilidad de anexar estos tramos a las concesiones.
El secretario de Infraestructura de Antioquia, Gilberto Quintero, dijo que aunque hay problemas con los recursos nacionales para estos broches, “entre la empresa privada, los gobiernos locales y la Nación se busca conseguirlos”.
Sobre el derrumbe en La Sinifaná, Mauricio Millán, director de Covipacífico, precisó que están trabajando en actividades encaminadas a prevenir un aumento en el deslizamiento, entre ellas, el manejo de las aguas, seguimiento satelital y puntos de control topográfico. El objetivo es dar paso provisional en abril de 2020.
Gustavo Bernal, gerente de la Concesión La Pintada, de Pacífico 2, indicó que el equipo de ingeniería de Odinsa estudió 10 alternativas para el nuevo puente en Bolombolo, análisis que fueron cedidos a la Agencia Nacional de Infraestructura, por lo que están esperando una respuesta.
En entrevista con El COLOMBIANO, Juan Esteban Gil, director de Invías, precisó que la entidad tiene dificultades con la financiación y para ello crearon un grupo de trabajo que está evaluando cómo atraer ingresos futuros de peajes o de otras estrategias.
Pero, como añade la CCI, se terminó 2019 y no están ni los recursos. Y, mientras eso no ocurra, dice Villegas, “tendremos carreteras espectaculares y vamos a llegar a embudos en vías de una sola calzada con malas especificaciones”.
Contexto de la Noticia
Obras prioritarias PENDIENTES para la articulación de las vías.
1. Intercambio vial de primavera: no incluido
Este intercambio no está contemplado en las obras de la Conexión Pacífico 1 y el monto requerido para su construcción es de $100.000 millones (un valor proyectado a 2019, en estado de prefactibilidad). Su desarrollo es crucial, puesto que recibirá el flujo vehicular que se generará con la terminación de los tres Pacíficos. Inicialmente estaba contemplado como responsabilidad de Invías, pero Covipacífico precisó que para este sector ya hay un contrato con la ANI y que la concesionaria está dispuesta a financiar los trabajos con el fin de que el proyecto concluya según lo programado. Incluye un intercambiador a desnivel, además de las vías de conexión al alto de Minas, la entrada al municipio de Caldas y la gestión predial.
2. Los 3,3 km en el tramo primavera-cuatro palos
Esta obra incluye dos tramos que juntos suman una vía faltante en doble calzada (hoy en calzada sencilla), para la cual son necesarios $200.000 millones. El primero, comprendido entre Primavera hasta El Rancherito 1, es de 800 metros. El segundo, entre Rancherito 2 hasta Cuatro Palos, es de 2.500 metros. Villegas precisó que una de las soluciones es, al igual que con el intercambiador, anexar al contrato de Pacífico 1 la construcción de la vía. Dijo que el concesionario está dispuesto a financiarlas también con base en vigencias futuras que están disponibles desde el año 2025. Según Covipacífico, los diseños de estas intervenciones estarían para marzo de 2020 y pasarían a revisión y para comenzar los trabajos en 2021.
3. puente sobre el río cauca, en Bolombolo
El puente sobre el Cauca en Bolombolo garantizará la continuidad entre el Suroeste y Urabá. Opera con paso restringido desde 2016, pueden circular livianos en un solo sentido, lo que está afectando al 50 % de la cosecha cafetera en Antioquia, según la Cámara de Comercio. Tiene 65 años y no resiste repotenciación, por eso la solución es otro puente en Peñalisa para evitar que el tránsito se detenga. La obra calculada incluye vías de acceso entre Pacífico 1 y 2 y la nueva conexión a desnivel con la vía a Salgar. La alternativa de corto plazo incluye trabajos de mejoramiento por $10.000 millones, pero la construcción de una nueva infraestructura y la conexión a las concesiones costaría $166.000 millones.
4. tramo 2 del túnel del toyo no ha sido contratado
La fase 2 del Túnel del Toyo, que incluye 19,4 kilómetros, 11 túneles, 13 puentes y 12,3 kilómetros de vías a cielo abierto, necesita de 1,2 billones de pesos para su ejecución. Es responsabilidad del Invías, pero no ha sido contratado, no cuenta con presupuesto y según Villegas de la CCI, “hemos encontrado en información oficial que Invías piensa postergar la inversión hasta 2029 y nuestros cronogramas van hasta 2023. Esa disparidad nos preocupa”. El Toyo une las conexiones Mar 1 y Mar 2, por lo que este tramo afectaría el desarrollo de las tres concesiones portuarias previstas para Urabá. “Sería lamentable que en un futuro finalizaran todos estos proyectos y nos quedaran 20 km pendientes”, dijo el secretario Quintero. En entrevista con El COLOMBIANO, Juan Esteban Gil, director de Invías, indicó que el tramo está entre los proyectos que superan el periodo de gobierno, pero que es una tarea priorizada por la entidad para la cual continúan buscando los recursos.
5. autopista al magdalena 2, un año de parálisis
La autopista al Magdalena 2, la conexión 4G entre Remedios y Puerto Berrío, es la bisagra que une a otros dos corredores: Vías del Nus (Medellín-Alto de Dolores) y Conexión Norte (Remedios-Zaragoza-Caucasia). Según la CCI, los tiempos probables de entrega no coinciden: mientras Vinus, Conexión Norte y la concesión Antioquia- Bolívar tienen fechas previstas de entrega entre enero y julio de 2021, la Autopista al Río Magdalena 2 estaría finalizada para diciembre de 2023. Al problema se suma que hasta octubre de 2019 estuvieron paralizadas las obras tras la cancelación del contrato a la constructora española Obrascón Huarte Lain (OHL) en abril de 2019. El secretario de Infraestructura, Gilberto Quintero, añadió que es indispensable que Magdalena 2 tenga un aceleramiento en los procesos de ejecución para “conectar la zona nordeste con la región de la costa Caribe y la Ruta del Sol”.