Bogotá_La desaceleración de la economía que varios actores han advertido para 2015 ya comenzó. Así lo indicó el presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), Sergio Clavijo, durante el seminario macroeconómico organizado con Fedesarrollo.
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Las perspectivas del centro de pensamiento para el cierre del año le apuntan a un crecimiento de 4,6% explicado en un tercer trimestre de 3,6%, por cuenta de las caídas en los sectores agropecuario, minero e industrial.
Ante la evidencia, Anif ha cuestionado las acciones del Gobierno que, en opinión de Clavijo, insiste solo en mostrar los buenos resultados del primer semestre. “No pierdan el tiempo, eso ya lo sabemos, pero de poco nos sirve para prepararnos ante los cambios del mundo que exigen ser cautelosos para que esa ola no nos golpee como ya lo hace con Chile o Perú”, argumentó.
También hizo referencia a la reforma tributaria alegando que desincentiva la inversión al recargar a los empresarios con tasas de 44% cuando en países como México son de 34%. “¿Cómo vamos a competir así? Y luego se sorprenden porque las multinacionales se instalan en donde nuestros vecinos”, dijo.
La contrapropuesta de Anif es que se incremente el impuesto al consumo IVA gradualmente hasta 18%, ya que el promedio de la región es 19% y en Colombia se mantiene en 16%. Con esta decisión se ganaría un punto adicional de recaudo. También se habló de no gravar a las empresas (ya que se perjudican las pyme), sino a las personas y basado no en la riqueza sino en el ingreso.
“Buena parte de la culpa de los sinsabores la tiene el Gobierno por su falta de liderazgo y aún así sale con una propuesta que solo va por 0,37 del PIB en un esquema que se ensaña con las firmas en sus activos”, cuestionó el representante.
Al respecto el viceministro técnico del Ministerio de Hacienda, Andrés Escobar, justificó que la mala distribución del ingreso impide el crecimiento empresarial pues 20% de la población en mejores condiciones económicas se queda con 57,9% del ingreso nacional.
“Si no se acepta la reforma, el presupuesto que ya aprobó el Congreso va a tener que recortarse porque parte de esta política, que es por cuatro años, busca financiar el déficit”, explicó.
Sin embargo, Clavijo cree que el chip del Gobierno y de los empresarios “debe cambiar para ver lo que está sucediendo con el incremento de las tasas, la devaluación, los riesgos en geopolítica y la caída en ventas (volúmenes y precios)”, dijo.
Un balance del año presentado por la Asociación destaca la reducción en desempleo pero advierte que la inflexibilidad del mercado laboral tendría un impacto salarial. En ese sentido criticó los sobrecostos en contratación a los empresarios que llegan a 46% cuando en países como Chile están en cero. “Al final, sumando los parafiscales, el salario mínimo supera el millón de pesos y no se ve la voluntad del presidente, Juan Manuel Santos, por ajustar esa carga”, indicó.
Con respecto a la industria (que apenas crece a un ritmo de 1,6%) habló de señales de desaceleración como la caída en el consumo de energía (-0,2) en septiembre) y la vocación exportadora por cuenta de los altos cobros por el servicio de transporte.
El presidente de Anif resaltó además un complejo escenario internacional dado que el crecimiento de Estados Unidos en el último trimestre no fue el esperado (2,3%), lo que obligó a Colombia a ajustar sus perspectivas. “Se calculaba que la economía mundial cerrara entre 3,6% y 3,7%, pero quedó en 2%. Esperaremos a ver si en 2015 se logran crecimientos cercanos al potencial del primer trimestre de este año (3,6%)”, aseguró Clavijo.
En la Zona Euro, el balance tampoco es positivo. Países como Italia continúan contrayéndose mientras Francia reporta crecimientos lentos, incluso para Alemania existe un riesgo de deflación latente. La excepción en este grupo es España que de -1,2% pasó a 1,3%; “es la economía con mejores perspectivas por cuenta de la compresión salarial y la imposición de impuestos indirectos”, destacó el vocero.
Camilo Pérez, jefe de investigaciones económicas del Banco de Bogotá, describió el escenario mundial como estable aunque no negó que existe una reducción de expectativas de crecimiento. En consecuencia, la entidad bajó su pronóstico nacional de 4,6% a 4%. El experto atribuyó esta variación al comportamiento inflacionario que está provocando el sobredimensionar los efectos del fenómeno de El Niño y al rezago en infraestructura, lo que implica “desafíos gigantescos”.
Para 2015 la entidad financiera le apunta a un crecimiento de 4,8% o menor con la expectativa de que en 2016 termine por encima de 5% cuando se vea el impulso del resultado del incremento en obras civiles.
En el mismo sentido va el cálculo del Gobierno sobre el crecimiento de la economía que para este año permanecería entre 4,6% y 4,8% como mejor escenario.
Los retos que identificó el Gobierno
El Plan Nacional de Desarrollo presentado durante el seminario por el subdirector sectorial del Departamento Nacional de Planeación (DNP), Luis Fernando Mejía, identificó entre los retos para impulsar el desarrollo la competitividad empresarial, en ese sentido se apunta para incrementar la productividad, aumentar la inversión y convertir la empresa en el motor de crecimiento valiéndose de sus aportes como generadora de empleo y equidad. También vincularía al sector privado como un actor que aporta en la reducción de la desigualdad, pues el Indicador de Convergencia Intraregional identificó grandes diferencias en términos socioeconómicos entre municipios.
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