Mientras el país mantiene la alta dependencia del sector público, otros sectores importantes volvieron a caer.
El buen paso que mostró la economía del país en abril al parecer fue flor de un día o por lo menos eso es lo que pone en evidencia el nuevo reporte del Indicador de Seguimiento a la Economía en mayo, revelado por el Dane ayer y en el cual se aprecia cómo varios sectores claves como el comercio y la industria cayeron, mientras se mantiene la dependencia, otra vez, del sector público y el agro.
Según los datos entregados en esta oportunidad, la variación anual del ISE quedó en 2,4%, con lo cual el país logra un repunte significativo respecto al -0,1% del mismo período en 2023 y se convierte en el segundo dato más alto en lo que va corrido de este año, superado únicamente por el 5,6% que se obtuvo en abril.
Con este dato general, para Diego Montañez-Herrera, consultor del Banco Interamericano de Desarrollo, se tiene un primer dato relevante a analizar y es que la colombiana apenas crece 1,99% en lo que va corrido del año (período enero - mayo) de acuerdo con las cuentas presentadas por el Dane.
“El Indicador de Seguimiento de la Economía del Dane proporciona una medida de la evolución de la actividad económica de Colombia y en esta oportunidad nos dice que en mayo crece 2,45%, que si se contrasta a lo largo de todo el año, queda apenas cercano al 2%”, dijo este experto.
Acá también hay que decir que para el quinto mes del 2024 (dato preliminar) el Índice de Seguimiento a la Economía en su serie ajustada por efecto estacional y calendario, se ubicó en 122,64, lo que representó un crecimiento de 2,52% respecto al mes de mayo de 2023, cuando quedó en 119,62; según se aprecia en este reporte.
Crecimiento divergente
Haciendo zoom a los datos del ISE por cada sector que se mide en este informe, en su serie anual, las actividades primarias encabezadas por el agro siguen siendo uno de los mayores dinamizadores de la economía tras alcanzar una variación del 4,6%, que supera ampliamente el 1,7% de hace un año, aunque se descuelga frente al 10,3% de abril y queda con el segundo registro más bajo del 2024.
En este caso, José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda y rector de la Universidad EIA, señala que si bien las cifras confirman una leve recuperación, las mismas son menores que el mes pasado, lo que demuestra que hace falta un plan de reactivación económica urgente y que nuevamente la economía pierde fuerza en su dinámica mes a mes.
“Los resultados de industria y construcción siguen siendo bastante negativos (14 meses en rojo) y estos son claves para generar empleo. Podríamos estar cerrando el año con algo cercano al 2% en crecimiento, que sigue estando lejos de lo necesario para que no se deteriore el empleo y en general las posibilidades de la economía”, dijo este experto.
Para Restrepo Abondano, el ISE de mayo es la prueba fehaciente de que en el país hay un crecimiento divergente, con el que se está generando una alta dependencia de sectores como la administración pública, el agro y los energéticos, mientras que la industria, el comercio, el sector financiero, las TIC y la construcción, volvieron a caer.
Pasando la página, también hay que decir que el segundo crecimiento más alto por actividades se presentó en las terciarias, que terminaron con una variación anual del 3,1% que también dan un crecimiento notorio respecto a los datos de hace 12 meses (-0,1%), pero si se contrasta con los registros de abril, queda corto respecto al 5,2% que había en ese entonces.
Bruce Mac Master, presidente de la Andi, puso otra mirada de esta realidad en el panorama y señaló que es la competitividad la que se está comprometiendo y con esto, la capacidad de que Colombia se convierta en un destino atractivo para la inversión o la puesta en marcha de iniciativas que permitan frenar la desaceleración.
“No hay la menor duda de que la situación actual no solamente no nos está permitiendo aumentar en competitividad y diversificar el portafolio de exportaciones para Colombia, sino que nos está significando una reducción importante en la capacidad del país de poder fortalecer a su industria”, dijo este vocero gremial.
Acá se debe destacar que los resultados en las actividades terciarias fueron mixtos al desagregar por sectores, ya que así se haya terminado en positivo, hay caídas renglones como el comercio (-0,2%), información y comunicaciones (-0,8%) y actividades profesionales y científicas (-0,2%).
En la relación de actividades terciarias también se debe destacar que administración pública y defensa sigue siendo la estrella en esta actividad tras crecer un 9% y marcar distancia con el 2% de mayo del 2023. No obstante, si se tiene en cuenta que en abril marcó 13,5%; hay evidencia de que poco a poco se está perdiendo el impulso que traía en los reportes.
Industria en rojo
Un último dato a tener en cuenta en las cifras entregadas por el Dane sobre el estado de la economía en Colombia tiene que ver con las industrias manufactureras y la construcción (actividades secundarias), que regresaron a terreno negativo en mayo, tras el leve respiro que obtuvieron el mes anterior y retornaron a la senda de datos en rojo que traían desde hace más de un año.
Así las cosas, desde la Andi se dejó claro que hay que apostarle a la industria y a la construcción, puesto que “la reactivación sólo se podrá dar si tenemos estos sectores activamente siendo parte de la dinámica del país, para lo cual además también se requiere de, por supuesto, la confianza de los empresarios, la confianza de los inversionistas, la confianza de los consumidores, la confianza de los comerciantes que han tenido indicadores especialmente malos”.
Entre tanto, para la presidenta de la Cámara Colombo Americana, AmCham Colombia, María Claudia Lacouture “estos resultados reflejan un desafío significativo para la economía colombiana. Aunque hemos experimentado un crecimiento, este sigue siendo limitado y requiere medidas estratégicas para impulsar tanto la oferta como la demanda. Es crucial trabajar en conjunto con el sector privado para recuperar la confianza y promover la inversión”.
Esta experta indicó que además se debe mejorar la ejecución del presupuesto de inversión, que actualmente es solo del 22% comparado con el promedio de 27,4% de los últimos cinco años y destacó que la reciente iniciativa de un plan de reactivación es un buen comienzo, pero que se necesita mayor claridad en la financiación y los detalles de implementación para asegurar su éxito en el corto plazo.